Ruta de 16 días por los FIORDOS NORUEGOS [Itinerario día a día + Consejos]

La primera visita la debes dedicar al muelle hanseático de Bryggen, declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1979. Bryggen significa literalmente muelle en noruego, aunque hasta el final de la Segunda Guerra Mundial el barrio se conocía como Tyskebryggen, el muelle alemán. Los comerciantes de la liga hanseática empezaron a establecerse en esta zona a partir de 1360 construyendo sus almacenes y casas con madera, es por eso que el barrio ha sufrido muchos incendios y rehabilitaciones.

No te pierdas el edificio más antiguo de Bergen, la iglesia de Mariakirken, de estilo gótico y construida en el siglo XII. Otro de los puntos imprescindibles es el mercado de pescado de Bergen, donde podrás pasear entre los distintos puestos, allí también se encuentra la oficina de turismo.

Si eres un amante de las iglesias debes pasar por la Catedral de Bergen y la reconstrucción de la curiosa iglesia de madera de Fantoft, quemada en 1992 por un incendio provocado y rodeada de arboledas. Para ver Bergen desde las alturas tu mejor opción es coger el funicular de Floibanen para subir al monte Floyen o coger el teleférico de Ulriken para tener unas vistas aún más espectaculares. Si el tiempo no acompaña, en Bergen llueve una media de 200 días al año, te recomendamos visitar alguno de los museos de la ciudad como el Museo Hanseático o los Museos Kode. 

Te proponemos 3 planes diferentes para visitar Preikestolen: crucero por el fiordo de Lysefjord hasta Preikestolen, excursión en lancha por Lysefjord hasta Preikestolen dónde descubrirás el fiordo de una forma muy emocionante o excursión guiada hasta Preikestolen por el sendero lateral, evitando las multitudes durante el trekking y con recogida en Stavanger.

Este día te recomendamos levantarte temprano, ya que hay 3h de conducción hasta el inicio de la ruta desde Stavanger y ésta te debería llevar entre 6-10h. Una de las alternativas a conducir es coger el ferry que circula por el interior del fiordo subiendo el coche en él. Este barco te deja en Lysebotn, un pequeño pueblo a escasos kilómetros del parking de Kjerag.

En nuestro artículo Excursión a Kjerag: guía práctica para realizarla (próximamente) encontrarás toda la información imprescindible. Si quieres olvidarte del coche por un día te recomendamos uno de estos tours guiados que además incluyen los traslados y recogida en tu alojamiento: excursión de verano a Kjerag o excursión guiada a Kjerag.

Si decides no realizar el trekking a Kjerag te proponemos 2 planes distintos. Nuestra primera recomendación es realizar el crucero por el fiordo de Lysefjord hasta Preikestolen donde disfrutarás de este lugar maravilloso desde el agua. La segunda es visitar la espectacular cascada de Manafossen, la cual se encuentra en el fondo de un bonito valle, aproximadamente a 1h en coche desde Stavanger. De camino puedes aprovechar y parar a ver el fiordo de Frafjord, no te arrepentirás!

Con las pilas un poco descargadas después de tantas caminatas hoy te proponemos tomártelo con un poco más de calma. Empieza el día visitando la ciudad de Stavanger, si no lo has hecho en los días anteriores. No debería llevarte más de unas pocas horas.

A Stavanger se la conoce como la capital del petróleo de Noruega y dicho líquido es el motor económico de toda la región, convirtiendo Stavanger en una de las ciudades más caras del mundo. Para empezar la visita te sugerimos pasear por el barrio antiguo de la ciudad, llamado Gamle Stavanger. Éste está protegido por ley y compuesto por típicas casas de madera blanca construidas entre los siglos XVIII y XIX.

Continúa tu ruta por la calle Ovre Holmegate, la calle de los colores en noruego. Anteriormente estas casas eran todas blancas como las del barrio antiguo, pero en 2005 el peluquero Tom Kjorsvik tuvo la idea de pintarlas de distintos colores. El proyecto lo llevó a cabo el artista Craig Flannagan inspirándose en la serie de televisión de los años setenta Miami Vice. Esta calle y sus alrededores se han convertido en la zona de moda de la ciudad, llenándola de nuevos negocios.

Otro de los puntos de interés de Stavanger es la zona del puerto, para disfrutar de sus vistas debes pasear por la calle Skagenkaien. Y finalmente te recomendamos visitar la Catedral de Stavanger, la más antigua de Noruega. Construida entre los años 1100 y 1125 y de estilos gótico y románico, está consagrada a María y al Santo Swithun, patrón de la ciudad y es la sede de la archidiócesis de la iglesia luterana.

Si viajas con niños te recomendamos el Norsk Oljemuseum o Museo Noruego del Petróleo, que explica cómo la extracción de hidrocarburos en alta mar se ha convertido en la industria más importante del país. Las distintas salas muestran la formación y producción de éstos, pasando por los procesos de exploración, extracción y transformación de gas y petróleo. El museo abre de 10-19h de Junio a Agosto y de 10-16h el resto del año, excepto los domingos de cierra a las 18h. El precio de la entrada es de 150NOK (~13€) para adultos, 75NOK (~6,5€) para menores de 16 años y los menores de 5 años tienen la entrada gratuita. También existen descuentos para estudiantes, pensionistas y familias con más de 2 hijos. 

En Odda o Tyssedal te recomendamos pasar un par de noches, ya que es desde donde empieza la excursión del siguiente día. Encontrarás todos los alojamientos aquí, aunque nosotros te recomendamos el Trolltunga Guesthouse.

El quinto día de esta ruta de 2 semanas por los fiordos noruegos toca calzarse las botas de nuevo para realizar uno de los trekkings más espectaculares del país. Te recomendamos madrugar ya que se trata de una caminata larga y muy popular en Noruega. En nuestro artículo Excursión al Trolltunga: guía práctica para realizarla (próximamente) te damos toda la información.

El Trolltunga, traducido como la Lengua del Troll, es una piedra que sobresale 700 metros por encima de la presa de Ringedal. Se trata de una ruta de 20km i/v sin ningún tipo de dificultad exceptuando los 400m de desnivel, si coges los dos autobuses lanzadera que te llevan hasta el inicio de la caminata o tienes la suerte de aparcar en el último parking. Si quieres asegurarte tu sitio debes ser previsor y reservar tu autobús o parking con antelación!

Hacer la excursión debería llevarte entre 7 y 10 horas contando paradas y la sesión de fotos en el mirador. Ten en cuenta que es un recorrido famosísimo y que pueden realizar la caminata más de 1.000 personas en un mismo día, por lo que las colas para la foto pueden ser de 1h. 

La siguiente parada del día es la magnífica iglesia de Borgund. La Borgund stavkyrkje es una antigua iglesia de madera construida alrededor del año 1180 y en uso hasta el 1868, cuando se construyó una de nueva y ésta se restauró para conservarla como museo. Además, también conserva el único campanario de tablones de madera que se mantiene en pie de toda Noruega.

Se trata de una ejemplo prácticamente único de iglesia medieval de madera. Su peculiar color marrón oscuro es debido a que está recubierta de diversas capas de alquitrán destilado de pino para su protección. Fíjate en las cabezas de dragón talladas en su techo, pues son muy similares a las que los vikingos construían en sus barcos!

Esta caminata de 12km y 690m de desnivel es exigente, ya que hay que trepar un par de veces y te puede llevar entre 4 y 6h realizarla. El sendero no está señalizado, pero es fácil de seguir y no es recomendable con mal tiempo. El camino empieza directamente en el parking de la carretera 51 entre Randsverk y Beitostolen, el cual es gratuito.

Después de cruzar un pequeño puente sobre el río Varga te encontrarás una leve subida. Al final de ésta debes tomar el camino de la derecha que va directo hacia la cresta. Desde este punto el sendero no tiene perdida e irá ascendiendo de forma gradual, excepto en algún tramo expuesto o donde se tenga que trepar, hasta llegar al pico.

Te recomendamos realizar la bajada por el otro lado, porque aunque sea más larga no depara dificultad alguna. Cuando llegues prácticamente al lago Gjende debes girar a la izquierda para volver al parking bordeando un lago primero y siguiendo el curso de un río después.